| Con estas contundentes palabras calificaba Pascual Serrano, reconocido periodista y ensayista español y uno de los fundadores del diario alternativo de información Rebelión, la situación de las empresas tradicionales de comunicación que están quebrando durante esta renovación -o según algunos, revolución- empresarial llamada crisis. |
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| Pascual Serrano (Imagen obtenida de El Confesionario) |
Sin embargo, esta no es sino una de las muchas ideas
lanzadas a las ávidas miradas de los estudiantes de periodismo y
comunicación que hoy, lunes 4 de noviembre, se han congregado en las jornadas
internacionales Futuro del periodismo de calidad ofrecidas
en el auditorio de la Faculta de las Ciencias Sociales y de la Comunicación
(del campus de Leioa) sobre las 16:00.
"Llevamos años de debate sobre la crisis del
periodismo, sobre la viabilidad o no del periodismo actual", ha
recalcado Pascual Serrano, dejando bien claro que el dilema a día de hoy del
periodismo no es algo nuevo.
No obstante, no duda en calificar esta crisis como una oportunidad -al menos para el periodismo- para reinventarse y ser lo siempre tuvo que ser: un periodismo social, profundo y de calidad; no el periodismo aséptico y "objetivo", el periodismo de citas sin investigación, ni profundización, ni interpretación, ni valoración que predomina actualmente en este país -y en el mundo entero.
En su denominado "análisis a contracorriente" realza dos puntos: que la crisis está afectando, principalmente, a los medios de comunicación tradicionales, a esas empresas que hasta ahora -y de momento- han especulado con la información como si de bancos se tratasen; y que la ausencia de anunciantes que está hundiendo a dichos medios de comunicación no es, por definición, mala noticia, sino que más bien presenta la oportunidad -junto con los avances tecnológicos y el abaratamiento de los soportes- de promulgar ese periodismo social y de calidad que defiende a capa y espada.
¿Y qué futuro le queda a
la prensa (escrita)?
Según Pascual Serrano, en resumidas cuentas, y no sin
cierta lógica, la vía contraria al ciberperiodismo: Si los diarios digitales
ofrecen informaciones basadas en la inmediatez y la brevedad, los periódicos formato papel deben de profundizar en
esos acontecimientos que la Red ha mencionado de pasada y fuera de
contexto, logrando así que esas noticias inconexas que nos ofrece continuamente
Internet cobren un sentido para poder definir, de esta manera, la realidad de
una forma más completa, aunque siempre, subraya, subjetiva.
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| Imagen de Esther Vargas |
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